Para nadie es un secreto que la normatividad actual les exige a todos los trabajadores que tengan en sus hábitos laborales un contacto con algún tipo de preparación, fabricación, almacenamiento y transporte de alimentos, realizarse unos exámenes médicos protocolarios y regulares.
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Manipulación de alimentos que tener en cuenta para que sea un ejercicio responsable
Certificarse es una tarea fundamental en la industria alimentaria, ya que garantiza la seguridad y salud de los consumidores y cumple su objetivo de tener una responsabilidad profesional y social.
Los exámenes médicos para certificarse como manipulador de alimentos evalúan las condiciones clínicas y epidemiológicas del aspirante y aseguran que estén aptos para desempeñar sus funciones de manera segura.
En este blog, hablaremos sobre los exámenes para la manipulación de alimentos y las buenas prácticas relacionadas con estos trabajos.
Este examen es uno de los componentes clave del proceso de evaluación, ya que durante este estudio, se realiza una valoración exhaustiva de la salud de la piel, en busca de cualquier anomalía o lesión que pueda representar un riesgo para la seguridad alimentaria de las personas.
Además, se evalúa el estado del sistema osteomuscular, por el hecho de que los trabajadores de la manipulación de alimentos suelen estar expuestos a tareas físicamente exigentes que pueden afectar sus músculos y huesos.
Este examen consiste en analizar muestras de heces fecales en busca de parásitos y bacterias que puedan transmitirse a través de las comidas. Es fundamental detectar estos organismos para prevenir brotes de enfermedades transmitidas por alimentos y garantizar la seguridad de los consumidores.
Este procedimiento es sencillo pero importante, ya que implica tomar una muestra de la superficie de las uñas del trabajador para verificar la presencia de microorganismos patógenos o suciedad que pueda contaminar los alimentos.
Siempre recomendamos mantener las uñas cortas, limpias y libres de esmalte porque el frotis de uña permite detectar cualquier incumplimiento de estas normas de higiene.
Por último, el frotis faríngeo o cultivo faríngeo es un examen que busca detectar la presencia de bacterias en la garganta del trabajador. Como bien sabemos, la garganta es una de las áreas del cuerpo más susceptibles a la colonización bacteriana y si un trabajador está infectado, existe el riesgo de que las bacterias se transmitan a los alimentos mientras los está manipulando.
Los exámenes de manipulación de alimentos deben ser realizados mínimo una vez al año o como indica el artículo 11 de la normativa 2674 del 2013, para identificar el estado de salud de sus colaboradores. No obstante, acá damos algunos consejos y recomendaciones cotidianas para los trabajadores que desarrollan actividades que involucren contacto con alimentos.
En Omnisalud garantizamos la seguridad alimentaria y la salud de los trabajadores que manipulan alimentos. Por eso, ofrecemos un servicio integral de exámenes diseñados para evaluar las condiciones de las personas de su compañía que se dedican a estas actividades o las que están próximas a emplearse.
Nuestro equipo de profesionales altamente capacitados y con experiencia se encargará de realizar estos exámenes de manera precisa y confiable, garantizando resultados confiables y ayudándote a cumplir con los requisitos normativos de la Ley Colombiana.
Preguntas cómo certificarte en Manipulación de Alimentos